miércoles, 6 de junio de 2018

La llegada de las lluvias.

Ya se ven los parajes de Santa Lucía más enverdecidos. La llegada de las lluvias ha tomado todo el paisaje de las colinas y los montes. Los árboles en cuyos ramajes se veía aún la huella del verano pasado y su sequía, han empezado a reverdecer. Se ven las hojas de la ''mata e' plátano'' retoñando, y las pequeñas hojas de los arbustos del zacate limón tomando con alegría los bordes de los caminos que antes estaban empolvados.
Caminan los primeros días del mes de junio, y la naturaleza deja caer su llanto como una bendición en las tierras de mi campesino barrio. Algunas callejuelas ya se empiezan a ver dañadas por el agua que ha caído y que ha corrido libremente por el lastre, lavando así la tierra y sus amarres.
Cada tarde parece un poema donde todo rima con todo, y donde el supremo Escritor, nuestro Dios empuña su pluma con tinta de hechos para dar paso a la brisa que se convierte a veces en furia, a veces en caricia, para esta tierra santa y bendita del Creador.
Al levantar mi mirada cercana al atardecer, se ven los nubarrones grises cargados de vida y tormenta dispuestos a caer, colándose por las hojas nuevas del árbol de jocote y lavando el fruto de lo que ha sido la cosecha de mangos en cada uno de sus racimos.
La brisa hace verso con la lluvia que empieza a mojar los rincones de las colinas, y riman junto con el paso del agua que fluye por los montes y potreros llenado los riachuelos que sirven como bebedero para las aves y el ganado.
Incluso es delicioso sentir como las primeras gotas de lluvia caen en mi rostro, llenando de frío mis sentidos y recordándome que estoy vivo.
Se logra ver en algunas partes la furia de las montañas que se lanzan a las calles en protesta por la mano desmedida del hombre. Declaran la guerra a quienes no ha tenido misericordia al talar árboles y desviar cauces.
Las rosas se han abierto para recibir el aplaco a su sed...
Han llegado las lluvias, a veces con enojo, a veces como caricia, a veces como una enseñanza que termina en las noches mostrando que el dueño de todo, es la hermosa naturaleza en su equilibrio majestuoso llamado existencia...

Rapherty Villalobos Soto
Costa Rica
derechos reservados.
Para el Blogg Así es mi tierra.

Cae la tarde

 Cae el atardecer sobre las montañas josefinas, se adorna la capital con su frío veraniego dando un matiz ambarino a los pasos de la gente q...